En medio de los esfuerzos que las autoridades de Estados Unidos y México mantienen para controlar el tráfico de drogas en la frontera de ambos países, se siguen registrando casos de ciudadanos estadounidenses o residentes del país que intentan cruzar a territorio mexicano con armamento.
Así ocurrió con dos jóvenes de Arizona que recientemente fueron sentenciados por contrabando de armas, después de ser descubiertos tratando de viajar a México con cuatro rifles de asalto tipo AK-47 pegados a sus cuerpos.
De acuerdo con un comunicado del Departamento de Justicia de Estados Unidos, los jóvenes, identificados como Manuel de Jesús Guzmán y Joshua Francisco Méndez, ambos de 19 años, admitieron su culpabilidad en los hechos ocurridos el 7 de junio de 2022.
Guzmán fue sentenciado a 18 meses en una prisión federal y Méndez a 12 meses y un día de prisión. Además, ambos tendrán que cumplir tres años de libertad supervisada después de finalizar su sentencia en la cárcel.
En el comunicado se detalla que los dos jóvenes intentaron salir hacia México por el puerto de DeConcini en Nogales, Arizona, pero fueron enviados a una inspección secundaria.
Fue ahí en donde los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) encontraron que los sospechosos llevaban en total dos rifles Romarms WASR-10, un rifle Century Arms VSKA y un rifle Century Arms BFT, que están prohibidos para exportación sin una licencia válida.
